Oppenheimer

Oppenheimer

Todo por ver, un negro candidato a la presidencia de la mayor potencia mundial, promete el cambio, change we can believe, sin cambio, no se sabe lo que cambiará. Rebaño de ovejas dirigidas por índices de popularidad, cañones de confeti y espectaculares puestas en escena.

Menos mal que los superdelegados pueden deshacer este entuerto provocado por la ignorante masa demócrata, quizás dirigida y manipulada desde un nuevo watergate, y dejar que una persona de la raza más digna siga gobernando el mundo, aunque para ello tenga que ser una mujer.

O quizás no, ¿y entonces que pasaría? Obama aterrizaría con el Air Force One en la Habana, abriría el embargo cubano e impulsaría el desarrollo social y económico de Cuba. Levantaría el arresto, totalmente merecido por otra parte, a los presos de Guantanamo, enviándolos a sus países de origen para que sean juzgados dentro de la legalidad y el marco de las Naciones Unidas. Retiraría sus tropas de Irak y dejaría que el propio país gestionase la crisis. Y de puertas para adentro, eliminaría las barreras sociales existentes entre diferentes razas, independizaría el poder judicial, crearía un sistema sanitario accesible para todos los ciudadanos, eliminaría la pena de muerte y será restringido el acceso a las armas de fuego, adelgazará obesos y la cirugía estética será un derecho constitucional.

Ya que no se sabe que cambiara, aquí algo posible escuchando su discurso, ¡y es que ahora entiendo la expresión trabajar como un negro!